22 enero 2008

Enrique Lihn


(retrato del Divinísimo Anticristo)


Nada tiene que ver el dolor con el dolor
nada tiene que ver la desesperación con la desesperación
Las palabras que usamos para designar esas cosas están viciadas
No hay nombres en la zona muda
Allí, según una imagen de uso, viciada espera la muerte a sus nuevos amantes
acicalada hasta la repugnancia, y los médicos
son sus peluqueros, sus manicuros, sus usurarios usuarios
la mezquinan, la dosifican, la domestican, la encarecen
porque esa bestia tufosa es una tremenda devoradora
Nada tiene que ver la muerte con esta imagen de la que me retracto
todas nuestras maneras de referirnos a las cosas están viciadas
y éste no es más que otro modo de viciarlas
Quizá los médicos no sean más que sabios y la muerte —la niña
de sus ojos— un querido problema
la ciencia lo resuelve con soluciones parciales, esto es, difiere
su nódulo insoluble sellando una pleura, para empezar
Puede que sea yo de esos que pagan cualquier cosa por esa tramitación
Me hundiré en el duelo de mí mismo, pero cuidando de mantener
ciertas formas como ahora en esta consulta
Quiero morir (de tal o cual manera) ese es ya un verbo descompuesto
y absurdo, y qué va, diré algo, pero razonable
mente, evidentemente fuera del lenguaje en esa
zona muda donde unos nombres que no alcanzan a ser
cuando ya uno, qué alivio, está muerto, olvidado ojalá previamente de sí mismo
esa cosa muerta que existe en el lenguaje y que es
su presupuesto
Invoco en la consulta al Dios
de la no mismidad, pero sabiendo que se trata
de otra ficción más
sobre la unión de Oriente y Occidente
de acápites, comentarios y prólogos
Un muerto al que le quedan algunos meses de vida tendría que aprender
para dolerse, desesperarse y morir, un lenguaje limpio
que sólo fuera accesible más allá de las matemáticas a especialistas
de una ciencia imposible e igualmente válida
un lenguaje como un cuerpo operado de todos sus órganos
que viviera una fracción de segundo a la manera del resplandor
y que hablara lo mismo de la felicidad que de la desgracia
del dolor que del placer, con una sonriente
desesperación, pero esto es ya decir
una mera obviedad con el apoyo
de una figura retórica
mis palabras no pueden obviamente atravesar la barrera de ese lenguaje desconocido
ante el cual soy como un babuino llamado por extraterrestres a interpretar
el lenguaje humano
Ay dios habría que hablar de la felicidad de morir en alguna inasible forma
de eso que acompañó a la inocencia al orgasmo a todos y a cada uno
de los momentos que improntaron la memoria
con impresiones desaforadas
Cuando en la primera polución
-mucho más mística que la primera comunión- pensabas en Isabel
ella no era una persona sino su imagen el resplandor orgástrico de esa creatura
que si vivió lo hizo para otros diluyéndose para ti carnalmente en el tiempo de los demás
sin dejar más que el rastro de su resplandor en tu memoria
eso era la muerte y la muerte advino y devino
el click de la máquina de memorizar esa repugnante devoradora
acicalada en palabras como éstas tu poesía, en suma es la muerte
el sueño de la letra donde toda incomodidad tiene su asiento
la cárcel de tu ser que te privaba del otro nombre de amor escrito silenciosamente en el muro
o figuras obscenas untadas de vómito
tu vida que —otra palabra— se deslizó, sin haberse podido
engrupir en lo existente detenerse en lo pasajero hundir el hocico
feliz en el comedero, golpear por un asilo nocturno
con el amor como con una piedra
la muerte fue la que se disfrazó de mujer en el altillo
de una casa de piedra y para ti de sombra y humo y nada
porque ya no podías enamorar a su dueña, temblando
del placer de perderla bajo una claraboya con telarañas
tienes que reconstituir ese momento ahora que la dueña de la casa es la muerte
y no la otra, esa nada ese humo esa sombra
darte el placer de ser ella y de unirte a ella como los labios de Freud
que se besan a sí mismos

13 enero 2008

07 enero 2008

Marejada & Guitarrazo


Horóscopo talibán y fen shui de la prehistoria, de todas formas, estoy mandando un poema escrito en un huevo duro.

Despertéme una mañana de aquellas teutonas en la Selva Negra, y díjeme a mí mismo, sin esperar respuesta: Lo sublime, como lenguaje primitivo y original del mundo, sería el modo cómo éste se nos manifiesta desnudo, muy por encima -y por debajo- del lenguaje interpretativo. Por lo tanto, es más fácil de identificar para el individuo dentro de un nuevo contexto (1). Y sonreí, salté de la cama con vigor, emprendí una fiesta de carcajadas cuyo desenlace no podría expresar muy bien.

Me perdí en una redondela. Si es como protestar -ni impotencia ni envidia-, más bien el destello feliz hacia el signo original que ocultamos debajo de un árbol. Los niños llevan mis ojos. Tamborileo. Campanas. El precio justo: una motocicleta dentro de la cabeza. Estridencias. El meado de perro. Viajé porque habían caminos. Presiona un dedo sobre tu frente, sacúdete la harina de la ropa. Este es un psicolugar y huyo con las esposas. O como cuando Redolés nos cantó:
“la primera vez adiviné tu signo, la segunda vez me ofreciste una empaná” / “la última vez siempre será la primera” / “Cuando la tarde languidece renace la sombra”

Por lo tanto: No + vueltas en rotonda. Abolición de la Rotonda como dispositivo pragmático. Abolición de ocultar la cabeza como avestruz.

Dulce contradicción entre adquirir más con menos, y menos con más.. estoy pensando en la conciencia.

Toca la guitarra tan suave como ama. Porsiacaso, mosquitos y también flores. Rascar no es lo mismo, porque viene del sustantivo ‘rasca’ (picor de frío). No es mi culpa que sepa a miel. Cómo poder olvidar más bien negar una cicatriz. Era escribano. Esa carta era para ti pero no podría asegurar nada. Quizá el problema estaba más en el mensajero que en el mensaje (donde el protagonismo requiere de más eficiencia que de masividad, aboliendo incluso el estatuto de lo mediático como extensión del capitalismo).

O: rebotar en un solo rebote en la cama de agua, y salir disparado hacia el centro de un zapato. Hola de nuevo!, with your hands in the trees. Hoy vengo a buscar algo, y ese algo lo tienes tú, pero tú estás en mí (??).. a ver, de nuevo: hoy vengo a buscar algo, y ese algo lo tienes tú, pero tú estás en mí. Sí, correcto, quedó igual.

Querer pertenecer al conglomerado de tu futuro. You said: “romance is a ticket to paradise”. Chita y aguantarse, un abogado y un científico. Y con ese ladrillo construir casas. Petróleo o bencina. Porque ni más tarde que temprano, un pequeño buitre vendrá a saltar por aquí, some eyes, South. No podría dejar de escribir en los tiempos del cólera. No renunciaré a escribirte con manuscrita. Percatas un poco y bastante acerca del cambio. Encantos suficientes. Todas las montañas te comentan de su sonrisa. Todas esas son provocaciones, algunas rimas que atacan tu oído. Estupidez Magma / Marejada y Guitarrazo. Las cosas que te apetecen. Vamos a unos goles (porque mientras más simpáticos menos goles). All tra lá lá, but just come back home. “If you want to watch the sea, just watch the sea, but do it now” , agregó Kevin.

Cuando Darwin sugirió que las contradicciones las generarían los estereotipos. Pero por suerte llegó el rock, y así, se determinó el mapa de la ONU.

Va quemando. Se viene quemando todo. Hay un salto, que parece ser el mismo de siempre. Embarcar, retroceder. Avanzar, colapsar. El cobollo, el agua, un torpedo, una quimera. Sol y su semisolsticio. Rompompóm y cachete. Te tiré junto a los pieces (para descansar en paz). O la aventura psicodélica, que no queda. Contradictorio: Ubicuidad vs. Sentido común. Quizá unas fotocopias sean lo correcto. O una semilla, obsesión precautoria. Filosofía física. Menos miedo, menos sensación preliminar. Mientras más perversión, mayor sería la cocodrilación del último estante. Un salto cuantitativo respecto al azar. Porque no estoy descalificando. Excess sucess: just fall in love.

La misma semiestrella, no pierdas el eje muchachuelo. Concepto de propiedad y de ciudad.. no, concepto de individuo en torno a otros como propiedad o ciudad: Obelisco.

Por último, la degradación estomacal te acompaña y te certifica una cuantía, un porque sí y un porque no. Rastreros, cancheros, futboleros, paralelepípedos. Un diagnóstico de probeta. Te llevas la cuchara, parece que no, pero sí. No levantemos la perdiz. Donde vayas todos te visitaremos. Bueno bueno, dependerá de la cantidad de electricidad que sepas canalizar. De ciertos poderes estamos discutiendo. Con un piano y una alcachofa. Esa es la condición por sobre cualquier chiste visual o amenaza de tu parte.

Mistela del Bages. Torrente arriba o torrente abajo. Una de las dos caecerá y carecerá de sentido. Totalmente hipopócritas y sensisibles. Ignorancia. Ígnico. Ignición. Luego de tanto andar y colmarme de erudición: corto el pasto. Soluble y carente. Destéllico. Acuático. Perverso. Lucúbrico. Empírico. Use the scream and refuse. Compromiso con lo cuestionable. O te dibujas en cámara rápida y permaneces en un constante presente continuo. Como aquella vez, en Rottweil de noche, donde estirábamos los brazos en la oscuridad y no podíamos vernos ni siquiera las manos, o si nos quedábamos en silencio, lo único que oímos fueron los pensamientos del otro. Así era ese pueblo, donde también le tuve que decir: “tu madre tuvo que ser pastelera, porque bombones como ese no los hace cualquiera!”

(when the people go to home, go to the sun-stop.. es un complejo, I just do it. Complejo dinámico. El trasnoche. El arranque. El destape. El desglose. El por fin, aprender a reirse declarando la independencia. On a godness, empty. Propias reglas. Propias cosas. Emptiness o el espacio acústico repleto de ti. Conexión. Calm down.)

Arranque. Ahora sí. El demonio. El contragolpe. El gol. Adolorido un soneto. Your kiss dismissed (es la mejor), your orange es la mejor.

Sí, sólo pienso en un par de cosas, que son 3 y en el fondo es la misma.

(1) compárese con el concepto de ciudad como totalidad irrepresentable para el sujeto individual, en Derrida, busque!

PD

Teoría Simple y Cobollística del Amor:

Siempre nos aproximamos a un reflejo del ser amado, ya sea ciegamente hacia adelante o en una correspondencia devota. De ahí, de esa "asimilación asimilada" surge el narcisismo que le faltaba proyectar a la persona amada para dejarse amar. Se equilibra la ecuación y hay, en consecuencia, amor.

(sé que suena algo frío pero es culpa de los cobollos maomenos)

05 enero 2008


cada uno se busca como puede; la culpa de todo la tiene el puto gobierno de su país

LINIERS