
“Nada tenemos que ver con la literatura... El surrealismo no es un medio de expresión nuevo o más fácil, ni tampoco una metafísica de la poesía. Es un medio de liberación total del espíritu y de todo lo que se le parece”
balas, bolsas de té y también de basura, bombas molotov en espacios reducidos, tortas de cumpleaños sin cumpleaños, budismo punk aplicado, gastronomía especializada en días domingo, fútbol como extensión de una utopía y análisis semántico de fotografías en movimiento y estáticas. Por lo pronto, lo estrafalario deja de serlo: al levantar la lápida efectivamente ves el mar que Vicente te había dicho.